Es posible que el término ‘retiro’ no te haya preocupado por mucho tiempo. Probablemente tu foco está en todas las metas personales y financieras que quieres cumplir a corto y mediano plazo, pero es importante que sepas lo siguiente: estás en la edad idónea para comenzar a planificar tu retiro. Así como lo lees: el mejor momento para comenzar a ahorrar para el retiro es este momento. Mientras mas temprano mejor.
Tener esto en cuenta y actuar en consecuencia te ayudará a enfrentar uno de los principales desafíos sociales de nuestros tiempos: cómo disponer de los recursos suficientes para vivir una vejez digna, así como a ampliar la posibilidad de un retiro temprano, si fuera tu deseo.
Para darte algunas ideas, compilamos estas siete recomendaciones en las que puedes trabajar desde hoy por tu bienestar en los años de retiro.
- Establece una meta
Reflexiona desde hoy sobre tu meta de retiro y empieza a planificarte para alcanzarla. Decide si vas a orientar tu plan a lograr el retiro temprano, es decir, antes de la edad oficialmente establecida, o a los 65 años. A partir de esto podrás proyectar lo que debes ahorrar para alcanzar ese objetivo y hacer tus proyecciones para los próximos años. Será conveniente hacer un ahorro adicional a los fondos de pensiones, ya que este ahorro será factible dependiendo del nivel de ingreso y la cantidad de cotizaciones que acumules como trabajador formal.
- Elige dónde y en qué instrumento financiero ahorrar
Establece en qué entidad y cuál instrumento financiero empezarás a ahorrar. Es clave que elijas una entidad supervisada. Esto te ayudará a reducir el riesgo a que te expones al invertir. Sobre en qué instrumento hacerlo, se recomienda empezar con un producto simple, que cualquier persona pueda entender fácilmente sin ser experta en mercados financieros.
Pondera iniciar con cuentas de ahorro que generen rendimiento y, cuando tengas recursos suficientes, puedes crear un certificado financiero. Es importante mantener este ahorro separado de los gastos que vas haciendo para otros fines.
- Ahorra todo lo que puedas
Estás en un momento en el cual podrías generar dinero para ahorro. Trata de ahorrar lo más que puedas y mantener un estilo de vida que te lo permita.
- Mantén un fondo de emergencias
De nada sirve ahorrar e invertir dinero para tu retiro, si cuando surja una emergencia necesitarás utilizar estos fondos. Guarda una reserva en una cuenta o un certificado que te genere los mayores rendimientos posibles. Esto te ayudará a prevenir la necesidad de solicitar un préstamo o incurrir en deudas de tarjetas de crédito en caso de una emergencia.
La meta, según los expertos debe ser formar un fondo que permita cubrir por lo menos tres meses de gastos fijos y, de esta manera, protegerte a ti y a tu familia, pero puedes empezar con el monto del que seas capaz.
5. Ahorra para adquirir un inmueble
Saber que contarás con un techo al momento de tu retiro te hará sentir seguridad y protección. Aunque tal vez no sea el momento para comprar una propiedad, por la magnitud de la inversión requerida, ve considerando este aspecto e incorporándolo en tus decisiones financieras.
En cuanto tu bolsillo lo permita, empieza a hacer el ahorro para tu vivienda. Recuerda que si consideras financiarla, debes esforzarte para que el inicial sea lo más alto posible, de modo que puedas solicitar un préstamo hipotecario por un monto moderado, que te permita mantenerte al día con los pagos y continuar atendiendo con holgura tus demás compromisos.
En este proceso te resultará útil tener un buen historial de crédito, pues así podrías negociar mejores productos financieros y mejores términos, lo que puede ahorrarte costos a largo plazo.
6. Administra tus expectativas
Las expectativas son un factor clave en una tarea como la de prepararte económicamente para la vejez. Como se trata de un plan a tan largo plazo, debes ser flexible.
Ajusta tus metas y tus expectativas cada cierto tiempo, considerando tus propio desempeño económico y factores externos, como la inflación y las políticas públicas que puedan impactarte en el retiro. Esto te ayudará a evitar frustraciones en caso de que las cosas no salgan tal como las planificas.